Tras el parón...

Como Galliano en Muchachada Nui, lo vas dejando, lo vas dejando, llega el miércoles y no tienes hecho nada...

O lo que es lo mismo, que uno se enreda con cosas, procrastina que da gusto y va dejando de lado ciertos "quehaceres" con un nada convincente "ya lo haré mañana"

Y así han pasado dos meses desde la última entrada... encima de política. Por todo ello pido disculpas a mis fieles lectores (es decir, los dos o tres que tengo, amigos todos ellos) y me dispongo a resarcirlos con una entrada que condense este periodo, algo ciertamente difícil, por la cantidad de cosas que me han pasado.

Para empezar me robaron la bici un día que la dejé aparcada frente a una clínica veterinaria, reventándome el "anti-robo", cosa que me jodió bastante. Ahora tengo una nueva, más barata y protegida con un antirrobo en U y una buena cadena de acero. Pero como supongo que este tipo de cosas no interesa a nadie paso a cosas más jugosas.

Antes del incidente de la bici estuve pintando mi primer cuadro. No tengo formación artística "oficial" (ni bellas artes, ni artes gráficas ni nada que se parezca) aunque vivo rodeado de cuadros, así que algo he ido aprendiendo. Además siempre hay quien me guía y me aconseja.

Una con flash, que se vea la textura del lienzo



Otra sin flash



Viéndolo ahora le saco miles de fallos, pero para ser la primera vez en mi vida que me pongo delante de un lienzo estoy bastante satisfecho

También ha sido ésta una época de experimentar en un campo que tengo más dominado (o al menos más practicado) como es el dibujo a lápiz. He estado probando otros estilos y tratando de desenvolverme con perspectivas y movimientos que nunca trabajo.

En este boceto, por ejemplo, buscaba un estilo más cercano al cómic, con una perspectiva e iluminación más bruscos de lo normal.



En este me interesaba trabajar principalmente el movimiento, ya que muchos de mis dibujos pecan de estáticos.



Por último una vuelta al realismo y un intento de ir dominando los pliegues de la ropa, algo que me trae de cabeza.



Aventuras artísticas al margen también he estado inmerso en otras actividades que ya os iré contando (aprender a manejar programas de diseño, componer alguna cosa con el bajo, etc) y liado con trabajos y tareas similares para la facultad. Eso no quiere decir que no haya tenido tiempo libre, y aunque no he salido mucho (bueno, yo NUNCA salgo mucho) hay un par de eventos que me gustaría comentar.

1) El concierto de Avalanch en su tour Muerte y Vida. Sencillamente perfecto.



Quien estuviese en el concierto de Sevilla vio como Ramón se superó de un modo imprevisible, sobrepasando con mucho lo que da de si en los discos. Y después del derroche de tono, control y potencia del que hizo gala, especialmente en un tema antiguo como Torquemada no me queda duda de que es el vocalista español que más me gusta, al menos en directo. El resto del grupo, pues como siempre, a la altura. La pena es que entre mi estado de salud y otras circunstancias personales no disfruté del espectáculo como me habría gustado. Más bien todo lo contrario.

2) Iron Man. Señores, esto es una película de super héroes bien adaptada. Ni paranoias intelectualoides, ni sesudos argumentos. Quien quiera ver una película seria, cruda y realista sobre un traficante de armas que vea la magnífica El Señor de la Guerra, porque esto es Iron Man, es Tony Stark tan chulo y creído como en los cómics clásicos (antes de que las editoriales empezasen a pensar en clones, skrull...).



Tiene el metraje justo, no aburre en ningún momento, desarrolla con calma y acierto al protagonista, toca muchos puntos puramente "comiqueros" (la máscara del primer traje, la referencia a Máquina de Guerra...). Es tópica y previsible, cierto, y en varios aspectos es mejorable, pero no por ello deja de ser lo mejor que he visto en Supers recientes desde Batman Begins.

Y con esto me despido hasta la próxima entrada. Que espero que sea pronto, pues en breve empiezo los exámenes y eso supondrá otro parón.